Libros y más libros

Hoy tenía pensado no hacer nada, pero como no se estar parada, me he puesto a limpiar y organizar mi mini-biblioteca.

Me gusta leer, y me gustan los libros. Pero tengo poco espacio, así que hace un par de años tuve que recurrir al libro electrónico. Ahora leo más, pero claro, no ocupan espacio en casa.

Lo dicho, me he puesto a limpiar, quitar el polvo, revisar, organizar e inventariar todos los libros. Me he pegado una buena paliza, pero he tenido ayuda de excepción. Teníais que haber visto a Javi limpiando el polvo de los libros.

Cuando los reviso me pongo melancólica. Cada libro tiene su historia. Cómo llegó a mis manos, si me gustó o no, si se lo regalé a Dany, o me lo regaló él. Si es de los que le regalaba a mi hermano y luego no les hizo caso y acabaron otra vez en mis manos... En muchos está el marca páginas al final, en otros hay cosas subrayadas. Algunas recuerdo haberlas subrayado y recuerdo el por qué. En otras lo subrayado no me dice nada.

Javi también tiene su mini-biblioteca, y le encanta "leer", y que le leas. Mirar los dibujos, inventarse historias que sólo él entiende, porque no hay quien le pille nada cuando arranca en su idioma-bebé. Por la noche, antes de dormirse, le leo un poquito de Jim Botón. 

Mi sueño sería tener una habitación grande con mucha luz, y muchas estanterías con muchos libros. Y también un par de butacas cómodas junto a la ventana para leer ahí sentada con Dany y con Javi. Pero de momento me tendré que conformar con mis casi 250 libros, porque no hay hueco para más.

Mermelada de melocotón

Qué bien huele mi casita ahora mismo, y qué rica me ha salido. Receta fácil, sin thermomix, que me he dado cuenta que las mermeladas me gustan más al método tradicional.

INGREDIENTES

La cantidad de melocotones que quieras (yo, pelados y sin hueso, me han salido más o menos 870 gr)

La mitad de fructosa (en mi caso, he puesto 400 g) Si no quieres usar fructosa, pues es la misma cantidad de azúcar que de fruta

el zumo de un limón

1 manzana verde limpia y cortada a trocicos, con piel y todo.

He cortado a trocitos pequeños el melocotón y la manzana. He añadido la fructosa y el zumo de limón y lo he puesto a fuego fuerte hasta que ha empezado a hervir, y luego lo he bajado a fuego bajo. Más o menos lo he tenido una hora cociendo. Esperaba que el melocotón se deshiciera, pero los trozos estaban intactos después de esa hora, así que le he pasado la batidora y santas pascuas.

Y mira, hoy pongo hasta foto y todo.

Acabo de darme cuenta que pongo las recetas igual que mi madre... así a ojo todo, y con demasiadas notas :S

Pollo a la cerveza

Y no, no es la receta en la que pones el pollo y te bebes la cerveza :P

La verdad es que no se de dónde salió esta receta. Se que la descubrí un día que iban a venir unos amigos a comer a casa, y como había un niño me decanté por unos macarrones y pollo, pero claro, para los mayores hice tagliatelle con salsa de foie, y el pollo lo hice así, guisado a la cerveza.

Es rápido y rico. Puedes acompañarlo con un arroz basmati, o añadir al guiso unas patatas.

POLLO A LA CERVEZA (para 2 personas)

2 muslos de pollo

1/2 cebolla

1 lata de cerveza

el zumo de un limón

1/2 l caldo de pollo

sal

pimienta

Dorar los muslos salpimentados y retirar. Pochar la cebolla y una vez pochada, añadir otra vez los muslos y darle un par de vueltas. Añadir la lata de cerveza, el zumo de limón y el caldo de pollo (y si quieres ponerle patatas, pues las patatas). Dejar cocer con la olla abierta unos 20 minutos. Después, cerrar la olla expres y dejar otros 10 minuticos más.

rico riquísmo ^_^

Cuenta atrás

El 29 Alba vuelve de Egipto. Por fin! He estado tan preocupada por ella que creo que me ha quitado un par de meses de vida. Pero ya casi está, el domingo llega a Madrid, y el lunes a Zaragoza.

Hace más o menos un mes decía que cuando llegara le iba a pegar una bronca de las que hacen época por haberme hecho pasar tantos nervios y tanta preocupación. Ahora mismo solo pienso que no pienso soltarla del abrazo de oso que le voy a dar.

Ella está tristona porque vuelve. Y yo estoy tan feliz por eso mismo, que casi me siento hasta mal.

Lo que está claro es que no va a volver la misma Alba que se fue. Aunque ella esté convencida de que no ha cambiado, sí que lo habrá hecho. Todos cambiamos ante un viaje así, un viaje para alcanzar nuestro sueño. Y aunque haya habido cosas que le han enturbiado este sueño, creo que las cosas buenas compensan con creces.

Y yo tengo muchísimas ganas de que me cuente, de llorar y reír con ella, de conocer a Mery, y a otros tantos (estos más difíciles de conocer), de ayudarle a revivir este sueño una y mil veces.

BIZCOCHO DE CHOCOLATE SENCILLO

A estas alturas ya sabéis que me encanta cocinar, y mi pasión es la repostería. Pero lo que más me gusta en este mundo es hacer bizcochos. Y comérmelos, que aunque parezca lo normal, en mi caso no siempre pasa. Hay muchos postres que me gusta hacerlos, pero luego no me muero por probarlos. Por ejemplo, la tarta de tres chocolates me encanta hacerla, pero si luego a la hora de comérsela no me llega un trocito, no paso pena. Pero el bizcocho.... ai, el bizcocho. Soy capaz de comerme uno de los grandes de una sentada, y con pocos remordimientos. 

bueno, que me lío yo sola. Para el cumple de Javi hice un bizcocho de chocolate que siempre sale espectacular. Los tíos de Dany no pudieron venir, y ayer que los estábamos visitando me dijeron que les habían llegado campanadas del pedazo de bizcocho que hice. Engordé dos o tres kilos de lo pava que me puse. Y les dije que les llevaría un trozo cuando hiciera.

Y oye, aprovechando que mañana viene una amiga a casa, pues preparo uno grande, les llevo medio a los tíos, merendamos, y lo que sobre para almorzar. 

Este siempre lo hago con Thermomix, aunque podría hacerse igual si no la tienes. En lugar de batir con la thermomix lo haces con unas barillas de montar, o con una batidora y arreando. Y si no le dais calor tampoco pasa mucho. La receta la saqué hace mil años (año arriba, año abajo) de la web Canecositas. Aquí vais a la receta en la web, y aquí os la dejo tal cual, pero sin las notas de Alicia Canecositas. 

Chico, que me enrollo más que las persianas... ya voy, ya....

INGREDIENTES

4 huevos
200gr de azúcar
150gr de aceite girasol
200gr de chocolate en polvo a la taza (yo uso paladin a la taza)
200gr de nata (1 brik pequeño) (cuando no tengo nata, uso leche)
1 cucharita de azúcar vainillado
200gr de harina
1 sobre levadura Royal

PREPARACIÓN

Precalentar el horno a 180º. Enmantequillar un molde de unos 24cm.
Ponemos la mariposa, el azúcar y los huevos. Programar 5 minutos, temp. 37º, vel 3 1/2
Al terminar el tiempo programamos 3 minutos más a la misma velocidad, sin temperatura para que esponjen.
Al terminar, añadimos el aceite y mezclamos 10 segundos al 3.
Añadimos el cacao y la nata. Mezclamos 15 segundos al 3.
Añadimos el azucar vainillado, la harina y la levadura. Mezclamos 15 segundos al 2 1/2 quitamos la mariposa, y terminamos de envolver con la espátula.
Vertemos en el molde y horneamos durante unos 45 minutos, según hornos, hasta que metamos un palillo en el centro y salga limpio.

Si quereis foto, vais a la web de Canecositas, que a ella se le dan muy bien (y a mi muy mal :P)

Los lunes al sol

El pasado día 2 despidieron a mi marido. Después de 12 años trabajando para la misma empresa, le dieron puerta. Así es la vida, y hay que tomarla como viene.

Ahora somos una familia de parados. Javi es el que más gana de esta situación. Por la mañana lo lleva a la guarde su papi (porque su mami no es persona como para vestirse y salir a la calle, y llevarlo en pijama no me parece buen plan). Y cuando vamos a recogerlo, ya vamos los dos. Así que felicidad absoluta para el peque. 

Los primeros días fueron raros y tensos. Pero una vez que han pasado, puedo decir que a Dani le está sentando bien eso de estar en el paro. Se le nota más relajado, y le estoy oyendo reírse como hacía tiempo que no se reía. Y sólo por eso, ya merece la pena.

Ahora hay que re-inventarse. Volver a acostumbrarse a vivir en otra nueva situación (que esperemos que no dure mucho).

Lo que me jode de todo esto es que no me parece nada justo que tengamos que pagar justos por pecadores en esta puta crisis. Estoy cansada de oír que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades y que por algún sitio tenía que estallar la burbuja. ¿Yo he vivido por encima de mis posibilidades? ¿cuándo? que me lo expliquen, porque no lo entiendo. Pero me quedaré con mi pataleta porque nadie va a venir a solucionármela, ¿verdad?

Lo que saco en claro es que ahora tengo mucho más tiempo para compartir con mi familia. Y que toda esta situación te hace replantearte tu forma de vida de mil maneras diferentes.

Tarde de domingo

Mientras ellos dan pan duro a los patos y las carpas, yo me siento y los miro. Tengo mucha suerte de tenerlos en mi vida. Y con tan poquito me siento feliz.

Síndrome de Peter Pan

Cuando era niña esperaba como agua de mayo mi 18 cumpleaños. Como si al alcanzar la mayoría de edad fuera a notar alguna diferencia, a recibir alguna revelación ultra secreta acerca de la vida, yo que sé. 

Siempre he parecido más joven de lo que soy. Lo que ahora es una ventaja, con 16 años era una puta mierda. Así, con todas las letras. Soy 4 años mayor que mi mejor amiga, y me jodía de una manera sobrehumana que a ella no le pidan NUNCA el carnet, y a mí me lo pidan casi hasta para comprar chucherías.

Con 18 años podría tener carnet de conducir, irme de casa si quería, no tendría por qué esconderme para comprar tabaco, o para beber. Cuantísimas cosas podría hacer!! No pensaba en las "obligaciones" que implicaría eso de ser adulta.

Llegaron los deseados 18 años. Y nada. No noté ningún cambio. Seguí escondiéndome para beber y fumar, aunque no para comprar.  Lo de irme de casa, pffff, ¿dónde iba a irme? lo del carnet sí, que a los 18 años ya tenía carnet y coche compartido. Pero nada más. Seguía igual que siempre. Seguía gustándome jugar a peinar muñecas (aunque lo hiciera a escondidas). Seguían gustándome los dibujos animados y las series cutres de adolescentes. 

Y pasaron los años. Tengo 34, estoy casada, tengo un hijo. Soy responsable, madura y blablabla. Y sigo sin sentirme como un adulto. Sigo viendo dibujos animados al lado de mi hijo, casi casi con el mismo entusiasmo que pone él (a veces, incluso más).

Los problemas de los 18 siguen estando a los 34. Cuando oigo que mi madre habla indignadísima porque su amiga Fulanita no la llamó el otro día para ir a tomar café a su casa, pero sí llamó a Zutanita aunque siempre dice que le cae peor, pienso que eso era lo que me preocupaba a los 16. Y si a su edad (que no la digo porque no tengo muy claro cuántos años tiene mi santa madre. Demasiado hago con acordarme de los míos) sigue con esos problemas infantiloides, ¿es que tampoco se sentirá adulta? 

"...¿crees que es el gran secreto que nos esconden los mayores? ¿Que nunca te sientes como un adulto?"

(Una casa llena de palabras)

entrevistas de trabajo

Estaba esta mañana preparándome para una entrevista de trabajo, la primera que he hecho desde noviembre, y me ha dado por pensar que el "ritual" de preparación es exactamente igual al ritual de una primera cita.

Me he visto arreglándome el pelo con cepillo y secador para sacar bien todo el brillo y quitarle ese aspecto de Rey León que me queda cuando se seca al aire. Me he maquillado sutilmente, para que se note buena cara, pero sin que se note que llevas maquillaje. Los labios naturales. Decidiendo qué ropa ponerse: que no sea demasiado atrevida, ni demasiado seria. Ropa cómoda, que no se note "disfrazada". 

Y ya ni hablo de las vueltas que le das a la cabeza: cómo será la persona que me haga la entrevista (hoy por lo menos, sabía que era mujer.), le gustaré, me gustará, me llamará, pareceré desesperada, cuándo es el momento idóneo de llamar yo sin que se me note la desesperación en la voz...

En fin. Que por lo menos la entrevista no ha ido mal. Es probable que me llamen para una segunda entrevista. Y vuelta a empezar, otra primera cita...

Mamá ya no grita

Hace unos días recibí una invitación por Facebook para empezar un reto. Normalmente no suelo aceptar invitaciones a páginas, ni juegos ni mierdas de esas. El Facebook lo uso para hablar con gente con la que normalmente no puedo hacerlo en persona por los motivos que sean, y además, para intercambiar opiniones y recomendaciones en un grupo de lectura. La cuestión es que me llamó la atención. Se llama "Mamá ya no grita", y el objetivo es que dejemos de gritar a nuestros niños.

Está claro que los niños hacen lo que ven, que si tú en casa gritas todo el rato, el niño se acostumbrará a que gritar es lo normal. Lo lógico sería hablar siempre en un tono adecuado, sin gritar y todo eso. Pero por desgracia, no siempre es posible.

Javier es un niño muy bueno. Es movido, inquieto, observador. Mi hermano siempre dice que es un explorador. Así que no gritarle es muy fácil. Aunque es cabezudo como el solo (maño, maño. Tiene la cabeza como un adoquín), así que a veces, y sólo a veces, nos lo pone muy difícil.

No estoy siguiendo el reto a rajatabla, porque como digo, suele hacer caso a la primera, y tanto su padre como yo nos controlamos bastante bien. Pero lo tengo en mente en esos momentos en los que los nervios se desbaratan. Así consigo cortarme antes de alzar la voz. O si no lo consigo, rectifico antes de seguir.

Esta última semana ha sido una semana dura. En casa los nervios están más a flor de piel que nunca por un cambio inesperado. Así que esta semana, tener el reto presente ha sido importante, al menos para mí.

Espero que sigamos así, sin tener que empezar el reto "en serio", durante mucho tiempo. Espero que solamente teniéndolo presente sea suficiente para seguir sin gritarle.

Bizcocho de yogur

Esta receta es vieja viejísima, pero es el bizcocho más rápido y rico que conozco. La única pega es que sale "poca" cantidad, así que para hornearlo hay que usar un molde no muy grande,  ya que si no en lugar de un bizcocho sale una españoleta XD.

Lo he hecho para llevarlo mañana a la guarde de Javi, que van a celebrar su cumple. Y como es para 20 niños, quería hacerlo un poco más grande, así que lo he "tuneado" un poco. Primero pongo la receta original, y luego cuento el tuneo:

BIZCOCHO DE YOGUR

1 yogur natural (el vaso se usa de medida)

1 aceite girasol

2 azúcar

3 harina

3 huevos

1 cucharadita Royal

ralladura de limón

Unir los ingredientes con la batidora lo justo para que se mezclen. Verter en un molde untado con mantequilla y harina. Cocer a horno moderado, de 30 a 40 minutos. 

Se puede hacer con el yogur del sabor que quieras. En caso de que sea de sabor, no añadir ralladura de limón.

Mi "tuneo", en lugar de un yogur, he puesto un vaso de buttermilk casero cutre (vaya, lo que viene a ser leche con un poco de zumo de limón para que se "corte"). He usado de medida el vaso. Y en lugar de poner 3 de harina, he puesto 2 de harina y 1 de chocolate en polvo. 

No se cómo saldrá de sabor. Oler huele impresionanemente bien.

Comiendo sin parar

Todo el fin de semana venga a comer... un no parar, oiga. El sábado en casa de mi suegra, que no se que les pasa a las madres/suegras que preparan comida como si no hubiera mañana... Y yo, que soy muy agradecida, como sin talento, por si acaso no hubiera mañana, que nunca se sabe. Claro, ayer a la cama sin cenar, que estaba empapuzada.

Y hoy, día de la Virgen de la Peña, fiesta grande en Alfajarín, nos hemos ido a comer a Casa Paco. Hemos comido otra vez sin talento. Además me he puesto una falda monísima de la muerte, estilo años 50, con talle alto y cinturón, ahí bien pretico todo, que no me he atrevido a bajarme un poco la cremallera por si luego no era capaz de volver a cerrarla. Qué horror... Así que hoy sin cenar a la cama, si no quiero que se me salga la comida por las orejas. Lo peor de todo es que estoy segura de que si me siento en la mesa y me ponen comida delante, me la arreo sin chistar...

Creo que en lugar de estómago tengo un agujero negro grande, muy grande. O la tenia, o algo así, porque si no no me lo explico.

Hoy Javi cumple 2 años

Cómo pasa el tiempo. A veces pienso que pasa demasiado rápido. Hace dos años a estas horas estaba con contracciones de la muerte deseando que Javier saliera ya, y no sólo por verle la carita, sino por dejar de tener esos dolores XD. Aunque es cierto que tengo pocos recuerdos de esa noche (ayer Dany me recordó que no pudo estar todo el rato conmigo en la sala donde te tienen monitorizada, porque había otra moza. Yo de la otra moza ni me acuerdo.).

Parece que fue ayer, y mira... ya charra como un loro, repite toooooodo lo que le dices. Está de gracioso diciendo "jodo macho". Hay que quitarle esa manía ya ^_^

Ya duerme en la cama "de mayores". Ya le estamos preparando para quitarle el pañal próximamente. En la guarde ya va a la clase de mayores, empieza con el inglés, hará excursiones, la procesión de semana santa, el festival de fin de curso... uf, mi bebé ya no es bebé :)

Felicidades, mi vida. 

Cena para dos.

El sábado dejamos a Javi con la abuela para tener un poco de tiempo para nosotros solos. Y este fue el menú de la cena. Fácil de hacer, y muy muy rico. Espero que os guste! 

Nota: las recetas las saqué de la web http://cenaencasa.es/

Ensalada de pollo al Jack Daniels 

Ingredientes (para 2 personas)

• 1 paquete de lechugas variadas.
• 250gr  de pechugas de pollo.
• 1/2 cebolla.
• 1 diente de ajo.
• 1/2 cucharada sopera de miel.
• 1 dedo de Jack Daniels.
• 1/2 de limón/lima.
• 1 cucharadita de mostaza de grano.
• ¼ de vaso de aceite de oliva.
• Sal, pimienta negra y pimentón picante. 

1. Cortar la cebolla y el ajo bien picados y pocharlos en la sartén con un poco del aceite de oliva durante unos 6-8 minutos hasta que estén transparentes.
2. Añadir la miel, el Jack Daniels, el limón, la mostaza, el resto del aceite de oliva y sal, pimienta negra y pimentón picante al gusto, y dejar a fuego lento durante unos 15-20 minutos. Pasar por la batidora (no guardar en el frigorífico, es mejor si se sirve templada).
3. Cortar las pechugas de pollo en tiras y hacer a la plancha a fuego fuerte para que queden tostadas. 
4. Servir una cama de lechugas, las tiras de pollo y la salsa templada por encima.

 

Brochetas de langostinos y piña en salsa de coco

Ingredientes (para 2 personas)

• 8 langostinos de buen tamaño.
• Media piña pequeña.
• 1/2 bote de leche de coco para cocinar.
• una guindilla de cayena
• Brochetas para servir.
  
  

1. Llevar a hervir la leche de coco con la cayena, sal y un chorrito de aceite. Dejar a fuego medio unos 20 min para que se reduzca.
2. Cortar la piña en tacos pequeños y saltearla a la plancha durante 2 min hasta que esté hecha.
3. Pelar los langostinos, salarlos y hacerlos a la plancha hasta que estén dorados. 
4. Hacer brochetas con dos langostinos y dos trozos de piña, y servir calientes con la salsa de coco picante por encima