sábado, 26 de octubre de 2013

Calabazas de Halloween

La semana que viene va a ser una semana muy ajetreada en la guardería. Decoración de la clase, pizzas monstruosas, psicomotricidad terrorífica y fiesta de disfraces de Halloween. Así que todo eso quiere decir que tenemos un finde ajetreado en casa. Mis cuñados están preparándole disfraz a Javi. Yo para los disfraces soy negada, y ellos están más acostumbrados. Le están preparando un disfraz de esqueleto que lo flipas.

Para decorar la clase nos han pedido que hiciéramos una calabaza monstruosa. Así que esta mañana me he puesto a prepararla. Me lo he pasado en grande. Ha sido más sencillo de lo que creía.

Lo primero es preparar todo lo que vamos a necesitar: la calabaza, un cuchillo, una cuchara para vaciarla, una plantilla de cara monstruosa y un punzón.

Primero hay que cortar la parte de arriba para poder vaciar la calabaza. Hay que tener en cuenta que por el agujero tiene que caber la mano. Yo lo he dibujado primero con un rotulador, después le he dado con el punzón y he terminado con el cuchillo.

Calabaza ya recortada
Después hay que quitarle todas las pepitas y las fibras. Las pepitas las he quitado con las manos. Las fibras he empezado a quitarlas ayudándome con el cuchillo, pero he terminado haciéndolo con una cuchara. Ha sido más fácil y rápido.

Ya está vacía
 El siguiente paso es dibujarle la cara. Para esto tenemos varias opciones. Hay calabazas que ya las venden preparadas con pegatina en la cara y en los ojos. También puedes buscar por Internet una plantilla de cara monstruosa (hay miles), imprimirla y pegarla con celo. Otra opción es dibujarla a mano en un folio y pegarla con celo, o como lo he hecho yo, dibujándola con rotulador (después es importante darle bien con un algodón y alcohol para quitar los restos de rotulador, que quedan muy feo)

Mi cara "monstruosa"
 Después, igual que con la tapa, he dado con el punzón al borde de ojos, nariz y boca. Para terminar de recortarlo, me he ayudado con el punzón y el cuchillo, dependiendo de si el trozo a recortar era más grande o mas pequeño. Una vez recortado, empujas para dentro y quitas el relleno.

Terminada!
 Como la calabaza era para llevarla a la guardería y había que ponerle el nombre, en lugar de ponerlo en rotulador, me lo he "currado" un poco más y lo he puesto por detrás, igual que he hecho la boca y ojos, pero sin traspasar toda la calabaza y quitando sólo la primera capa.

  

Y aquí está con la velica dentro, iluminada. 


jueves, 24 de octubre de 2013

Víspera de todos los Santos

O Halloween, llámalo como quieras. Al fin y al cabo es lo mismo, por mucho que nos empeñemos en decir que no. Sólo ha cambiado un poco la manera de celebrarlo.

Cuando era pequeña, mi madre ponía en el cuarto donde tenemos la lavadora unas velas. Ponía tres o cuatro. Una por su padre, otra por su madre, y las otras eran para el resto de familiares y amigos que habían fallecido.  Ahí las dejaba hasta que se acababa. Todavía sigue poniéndolas, solo que ha cambiado la ubicación, y el tipo de vela. 

Mi madre hacía buñuelos (qué ricos) y compraba panellets. Aquí todo se celebra comiendo.

Yo me las intentaba apañar para irme a Nuez con mis amigas. Esa noche salíamos a la peña, y contábamos historias de miedo. Nos íbamos a dar una vuelta hasta la puerta del cementerio (uuuhhh, qué osadas XD), y yo, que era muy cabrona, me lo pasaba en grande metiendo miedo a la pobre Vanessa (que también era muy cabrona, pero le podía el miedo jeje)

Me gustaba ir al cementerio. Los cementerios me han gustado siempre. Son muy tranquilos, me dan paz. Pero además, para todos los santos, estaba todo más arreglado, con más flores. Me gustaba ir con mi madre y mi tía, porque me contaban las historias de la familia. Luego, cuando iba yo sola, repasaba las tumbas, intentaba acordarme de todos bisabuelos, tíos, tatarabuelos y demás, que no se me olvidara ninguno.

Ahora, se vacían calabazas, se les dibujan caras y se mete velas dentro. El fin, el mismo que las candelas que ponía mi madre: Guiar a los muertos. Los niños van a coger caramelos por las casas. Pues eso, a comer dulces (como los buñuelos, panellets, huesos de santos...) Se disfrazan de cosas terroríficas. No se si se contarán historias de miedo o no, supongo que sí. Como yo.

Lo que yo digo: mismo perro, diferente collar.


lunes, 21 de octubre de 2013

No se de dónde saca la energía

Esta madrugada, sobre las cuatro de la mañana, Javi nos ha despertado medio lloriqueando y con ruidos raros. Hemos saltado Dany y yo como si tuviéramos un muelle en el culo y hemos ido a la habitación para encontrarnos al pobre Javi llorando y vomitando como la niña del exorcista.

Mientras Dany cambiaba las sábanas y ponía una lavadora con las sábanas, el pijama de Javi y los nuestros, yo limpiaba a Javi. Hasta la cabeza he tenido que lavar al pobre. Total, que entre pitos y flautas, serían las 5 y poco cuando hemos vuelto a dormirnos todos.

Yo me he despertado como un zombie. Tengo muuuucho sueño, muchísimo. Dany está igual, pero lo lleva con más dignidad.

y Javier? pues se ha despertado tan feliz. Ha estado viendo dibujos, ha desayunado bien, ha estado bailando el cd de Funny Bunny, dándolo todo. Ahora estamos esperando a que nos llame el medico, y Javi esta feliz jugando. A partir de mañana cambio mi café cargado por leche infantil con cereales, a ver si así consigo seguirle.

jueves, 17 de octubre de 2013

Jugando en el parque

Con este tiempo veraniego, después de recoger a Javier de la guarde nos vamos con la pelota a jugar al parque. A ese parque no vamos casi nunca por la tarde, porque los niños que hay son más mayores, más brutos y unos jetas. A medio día no hay casi niños. Solemos coincidir con uno que es un año mayor que Javi, que se llama Daniel. Es un poco más bruto y bueno... no es muy jetas. Hoy, además de Daniel ha aparecido de la nada otra niña que cumplía todos los requisitos de "niño de los de por la tarde". Así que después de ver que no dejaban jugar a Javi con su pelota (la de Javi), he cogido los bártulos y nos hemos subido a casa. Fin de la pelea.

La culpa de que sean unos jetas no la tienen los críos. Qué va. son los padres. Pero es que yo flipo. La madre de Daniel está sentada tranquilamente en la terraza del bar, tomándose un café. Daniel está a su lado, sentado tranquilo, y cuando aparecemos nosotros se teletrasporta a nuestro lado. Y la madre ni se inmuta, ahí lo deja, que lo entretengamos nosotros. Normalmente no lleva juguetes porque viene del colegio, así que tiene que jugar con lo que bajamos nosotros.

La niña que hoy ha salido de la nada, lo mismo. Parece que haya aparecido por generación espontánea, así sin mas. Ni rastro de padre, madre o tutor. Suponemos que estarían en el bar, pero eso está sin confirmar. Ha venido corriendo, y le ha quitado la pelota a Javi, así sin mas. Me ha salido la vena macarra y, por supuestísimo, le he quitado la pelota a la niña. No dejaba a Javi jugar con SU pelota. No me jodas! bájate una de tu casa! Así que he tenido que ejercer de "adulto responsable" y decirles que teníamos que jugar todos, o que si no guardaba la pelota. He conseguido un rato de calma, pero enseguida ha empezado otra vez a querer quitarle la pelota a Javi. Cuando me he hartado, he recogido todo y les he dicho que nos íbamos. Qué pensáis que ha hecho la cría? Pues con todo su morro decirme que dejara la pelota, que quería jugar. Pero de qué va esto?!

Por lo visto, ahora lo que se lleva es bajar al parque, soltar al crío para que se entretenga sólo, y a poder ser con los juguetes de los demás. Y si eso, que el padre de otro niño esté pendiente del suyo y del mío, que mi café y mis pipas requieren más atención. Y si el dueño del juguete se va, no pasa nada... que deje el juguete, que hay que compartir. No te jode!

Así que se acabó bajar a ese parque, buscaremos otro donde haya niños con padres menos asilvestrados. Luego todo es llamar a Supernnany, El Hermano Mayor o el Campamento. Y si no se les soluciona, siempre les queda Mujeres, Hombres y Viceversa.

Cómo está el patio, oiga....

sábado, 12 de octubre de 2013

Día muy largo

Tres veces he empezado esta entrada, y tres veces la he borrado. 

Esta madrugada ha muerto el tío de Dany. Llevaba un par de años con un cancer. Ha habido momentos en los que parecía que estaba superado, que saldría de esta. Y cuando todo parecía ir bien, algo se torcía. En julio estaba estupendo. Le  estaban poniendo un tratamiento experimental y le estaba funcionando bien. En agosto empezó a tener fiebre, y como estaba constipado lo achacaron a eso. A final de agosto se dieron cuenta que no era fiebre, y de ahí hasta hoy ha ido todo cuesta abajo.

No era mi tío carnal, pero lo quería como si lo fuera. Incluso más si me apuras. No le van a hacer ni misa, ni velatorio ni hostias en vinagre. Lo incinerarán con su mujer he hijos presentes, y ya está. Fue su voluntad, y me alegro muchísimo de que la cumplan. Porque aunque parezca que eso de respetar la voluntad de los muertos tendría que ser algo normal, no lo es.

Le hemos explicado a Javier que el tío Antonio está en el cielo, como el globo de Pocoyó que le compró el otro día su yayo Manolo y que se le escapó. Ahora cuando le decimos que iremos a casa de la tía a verla, dice "Tía Begoña si está. Tío Antonio no" y pone carita de pena. Se que todavía no entiende qué es eso de morirse. Para él, es igual de duro que cuando se fue su amiguito Oli de la guardería. Usa la misma frase: "guille si está en el recreo. Oli no" (porque a guille le han cambiado de clase, pero lo sigue viendo en el recreo).

Me da miedo ir a casa de la tía, que lo diga ahí, y que la tía se ponga triste. No quiero que esté triste. El tío está mejor ahora. Ahora no le duele nada, no sufre. Sus últimos meses no han sido vida. Han sido una puta mierda.

Tengo mil cosas dentro que no se cómo hacerlas salir. No me salen palabras. No me salen lágrimas. Creo que no debería de estar triste porque esto ha sido lo mejor para él. Pero no puedo evitar sentirme vacía y con muchísima tristeza porque no lo voy a ver más.Ojalá pudiera hacer algo para aliviar la pena de mi tía, de mis primos.

jueves, 10 de octubre de 2013

No estaba muerto, que estaba de parranda.

Y van dos los que me preguntan que si me pasa algo, que echan de menos las entradas del blog.

No pasa nada, no preocuparse. Sólo que últimamente me falta la soledad que me inspira para escribir. Antes las mañanas las pasaba sola en casa, y después de desayunar me sentaba en el ordenador y algo salía. Ahora está Dany, y como estoy acompañada tengo menos tiempo de divagar.

Además, se junta que tampoco es que me haya pasado nada últimamente digno de mención. Y las cosas que me han pasado son tan nimias que no merecen una entrada para ellas solas.

Alba ya ha vuelto. Su santa madre y yo ya descansamos tranquilas. Nos trajo a sus alumnas una tela blanca y negra muy bonita. Con ella me voy a hacer un traje muy bonito. Bueno, he mandado hacer una falda, que ya casi está lista. Y el sujetador me lo forraré yo con tiempo y paciencia. Después quedará la laboriosa tarea de buscar abalorios brillantes baratos e ir cosiéndolos. Porque he visto alguna cosilla, pero me han parecido caras para lo que son.

Javi sigue creciendo, y sigue dejándonos con la boca abierta. Ahora estamos con los cabezudos. A mí, que nunca me han gustado, me tenéis cantando la puñetera canción a todas horas. Javi va pidiendo (qué digo pidiendo... Suplicando!) que le llevemos a los cabezudos. Así que esta tarde nos vamos a verlos. Odio las fiestas. Bueno, no, no odio las fiestas. Si salgo me lo paso bien, me mola el ambiente y tal. Lo que odio son las aglomeraciones, la gente empujando, los maleducados y los borregos. Y de eso, en Pilares, hay demasiados. Son los primeros Pilares que recuerdo desde que estoy con Dany en los que nos quedamos en Zaragoza. Siempre huimos como ratas. Así que este año estoy desubicada por completo. Quiero hacer cosas, pero no quiero que en esas cosas haya gente. Y claro... eso es difícil.

En la guarde de Javi están haciendo muchísimas actividades, y el tío se lo está pasando en grande. El lunes tuvieron pregón de fiestas; el martes pintaron unos cabezudos y unos cachirulos; el miércoles hicieron un cachirulo con pan bimbo, nocilla y moras rojas y negras; hoy han tenido encierro, con vacas de cartón que las llevaban las profesoras. Nos han puesto un vídeo, y no os podéis imaginar lo que me he llegado a reír. Y mañana será la ofrenda. Prometo foto ;)

y plus plis plas, mañana más (o no...)